2007/03/30

Y punto!



Es tarde. Acabas de salir y la puerta se cerró detrás tuyo. No sé ni qué quiero, ni a dónde voy a ir mañana. Sólo para que sepas, te dejo unas cuantas puntualizaciones:

1. Escucho a Johnny Cash, me invade una inevitable melancolía. Especialmente porque es viernes. La voz áspera se incrusta en mi cuerpo. Pienso en ti, en el adiós definitivo. ¿Será? No te creo. Y sobre todo, no me creo. La melancolía invade más y más profundo. Directo al centro del pecho, en un viaje ansioso para clavarse y desangrar lo que hace falta que se vierta/pierda, en medio de un mar, el más profundo.

2. Esta melancolía me traslada nuevamente a la noche, inevitable, al vino compartido a medias, a tu voz leyendo tus versos, los de la sequía, que de eso sólo llevan el título.

3. El beso inminente, aunque seamos viejos y sea apenitas, lo espero. Ya sin miedo.

4. La noche, el centro de todo, de nuestras charlas y los abrazos, te trae con más fuerza a este paisaje tan a medias...

5. Te quiero y es inevitable.

5 comments:

Anonymous said...

He leído algo muy lindo.
Y lo he sentido tan lejano.
Me has dejado reflexionando.
Gracias.

Ambarviolenta said...

Sebas: Es cercano, es lejano... Como los recuerdos, que a veces atacan y se hacen tan presentes! Y otras, pues se disuelven en la memoria. Espero que el resultado de la reflexión sea positivo. Un beso grande!

Unknown said...

te devuelvo la visita...gracias por tus palabras a mis textos negros y tan depresivos
Otro beso......

Edu said...

Dicen que todo encuentro es también una despedida... jodido tu escrito.

Ambarviolenta said...

Ganjar: Gracias por la visita. Te habías perdido un buen tiempo, no?
Oso: de eso estoy segura. Y de que el texto es jodido... pues sí, pero sentido desde el fondo del alma. Un beso grande y gracias por el comentario, sabes que me hace bien la retroalimentación.